¡Hola!
Este año ha sido rarísimo… ¿Quién lo va a negar? Todos sabemos qué ha pasado y las consecuencias que está teniendo. PERO en esta ocasión me gustaría echarle un vistazo sólo a las cosas positivas, porque seguro que “algo bueno”, por pequeño que sea, nos habrá pasado a cada uno de nosotros.
Por ejemplo, echemos un vistazo a las cosas buenas que nos han pasado a todos:
- Nuestra incidencia sobre el planeta ha sido menor, y nos hemos vuelto un poquito más sostenibles gracias al auge de nuevas energías renovables, a la menor contaminación de este año y sobre todo gracias a una nueva bacteria que han descubierto en Japón y que se alimenta de plásticos. ¡Gracias señoras bacterias por ayudarnos a descomponer en días lo que tardaría cientos de años!
- Han vuelto algunos animales que estaban a puntito de extinguirse: ballenas azules, lobos, tortugas marinas, y hasta las famosas abejas de Notre Dame, que resulta que sobrevivieron al fatídico incendio.
- Parece que la situación ha despertado la solidaridad de muchas personas, y hemos visto como se han alzado grandes movimientos sociales de ayuda a los que más lo necesitan. ¡Y ojalá se levanten muchos más!
- Ha nacido el primer koala después de ese devastador incendio que acabó con la vida de cientos de miles de animales en Australia.
- El Capitán Tom (¡a sus 100 años!) nos ha dado un ejemplo de valentía con su campaña para recaudar 1.000 libras, que al final se convirtieron en 33 millones de libras. No te pierdas su historia. Es maravilloso que alguien pueda aportar tantísimo dinero a los trabajadores de la salud.
- Todos hemos aprendido a valorar las pequeñas cosas. Quizás antes éramos un poquito más egoistas, y también más ambiciosos. Lo que ha pasado este año nos ha hecho apreciar y valorar lo que ya tenemos, y eso es muy positivo.
Salvando los momentos de tristeza que todos hemos tenido en este año, a nivel personal 2020 me ha dado también buenos momentos, con la apertura de la tienda de cosas hechas a mano, de telas, y la llegada a mi vida de las ratitas (y ahora también amigas) de Maileg. La tienda ha tenido muy buena acogida, y eso me ha hecho muy feliz. Preparar algo con mis manitas, envolverlo en papel de regalo, y saber que va hacia casa de una nueva familia, ¡es muy gratificante! Y más cuando después de recibirlo me escribís tan bonitos comentarios. GRACIAS, GRACIAS y GRACIAS, porque tú has contribuido a todo esto.
Aprovecho para desearte que el 2021 esté lleno de cosas buenas para ti y para los tuyos.
Nos vemos pronto,
Lúa Marthin
EL MARAVILLOSO MUNDO DE MAILEG
Sus ratitas, su casita de muñecas, sus complementos… ¡La colección es casi infinita!